La Fiscalía de Medio Ambiente del Tribunal Superior de Justicia (TSJ) de Murcia investiga un posible delito medio ambiental en el Mar Menor, que afecta a las poblaciones de Los Nietos, Mar de Cristal, Villas Caravaning, Islas Menores y una zona limítrofe con el parque regional de Calblanque, provocado por el desarrollo de un cultivos intensivos de regadío en un suelo destinado antes a secano, informó a esta Redacción el presidente vecinal de Mar de Cristal, Ángel Monedero.

«El problema afecta a una extensión de cuatro millones de metros cuadrados, desde la orilla del Mar Menor hasta una zona de suelo que limita con el parque regional de Calblanque», argumentó Monedero, quien señaló que hasta ahora el único que se ha tomado interés en este tema es el alcalde de Cartagena José López quien ya presentó una moción en la anterior legislatura cuando estaba en la oposición. Los afectados son una población cercana a las 600 personas, que supera las 15.000 en época estival, «aunque es en esta época del año cuando el problema se agrava. Al poner en marcha los cultivos hicieron una serie de roturaciones en el terreno y dos colectores subterráneos bajo la vía rápida de la Manga que recogen el caudal de los 14 o 16 colectores que evacuaban el agua que baja de las sierras porque al cultivo de regadío no le interesa el exceso de agua. A esta circunstancia se une el hecho de que han allanado el terreno, de forma que en cuando llueve un poco más de la cuenta, el fango alcanza la urbanización de Mar de Cristal, Villas Caravaning y Los Nietos», indicó el representante vecinal.

En 2009 este suelo era de secano, aunque en 2011 estaba previsto que se recalificase como suelo urbano, cosa que finalmente no sucedió.

Uno de los afectados, Manuel Alonso, quien regenta un hotel en esta zona, señaló que se ha llegado a plantear la posibilidad de echar la persiana. «Llevo aquí desde 1987, pero desde hace tres años cada vez que llueve algo fuerte sufrimos los efectos de un tsunami. Además, el consorcio de seguros no se hace responsable porque esto no es una catástrofe natural, ya que la provocan esos movimientos de tierras, desvíos de cauces y colectores que han hecho».

Esos terrenos son propiedad privada y antiguamente eran suelo de secano. «No sabemos si tienen autorización de la Comunidad Autónoma para cambiar el uso de suelo a cultivo de regadío intensivo ni si existe declaración de evaluación ambiental, aunque lo hemos preguntado en varias ocasiones», dijo. Esta redacción trató sin éxito, de conocer la respuesta de la Comunidad.

Los vecinos llevan más de dos años luchando por encontrar una solución a este problema. Durante todo ese tiempo han enviado escritos a la Confederación Hidrográfica del Segura, al Servicio de Protección de la Naturaleza de la Guardia Civil (Seprona), al ayuntamiento de Cartagena, la Comunidad Autónoma, la Demarcación de Costas del Estado e incluso al Defensor del Pueblo. «Este último nos contestó hace tres meses que lo pondría en conocimiento del Congreso de los Diputados en vista de la falta de información por parte de las Administraciones», indicó Monedero.

Hace un año acudieron ante la Fiscalía del TSJ con un dossier de unos 600 folios «y ahora nos está requiriendo más información y, de hecho, el Seprona ya ha venido varias veces, la última el pasado lunes. Incluso han tomado imágenes aéreas», apostilló Monedero, quien hizo hincapié en que en el caso de la urbanización de Mar de Cristal «el cultivo está a unos seis metros de las viviendas y todo ello se debe a la modificación de cauces y pendientes».

Monedero señaló que ayer mismo le llamó el alcalde para comunicarle que estaba buscando una solución al problema y que también está valorando el profesor de la Politécnica, Ángel Pérez Ruzafa.