La construcción de una réplica de la antigua Puerta de Madrid en el espacio comprendido entre la parada de taxis de la plaza de España y la calle del Carmen ha sido bien acogida por los locales asociados a la Federación de Pequeños y Medianos Comerciantes de Cartagena. Sin embargo, su presidente Antonio Sánchez Arenas advirtió ayer de que el colectivo «ve con buenos ojos la instalación de este monumento siempre que no dificulte la accesibilidad de la zona ni interrumpa la circulación de vehículos».

En este sentido, Sánchez Arenas insistió: «No vamos a caer en los mismos errores del pasado -en alusión a la peatonalización del eje de las calles del Carmen, Castellini y Puerta de Murcia hacia el Puerto- y lo primero es que tendrán que hablarlo con los principales afectados que somos los comerciantes y los vecinos de la zona».

«Hablar con los perjudicados»

El presidente de la Federación de Pequeños y Medianos Comerciantes hizo hincapié en que «como un monumento más que gana la ciudad, nos parece una idea perfecta, pero al tratarse de un proyecto en ciernes, tendrán que hablarlo con los representantes sociales antes», apostilló.

De este modo, Sánchez Arenas planteaba ayer la opinión de los comerciantes ante la decisión consensuada entre el TSJ, la Asociación Amigos y Veteranos de Fortalezas, Castillos, Baterías y Viejas Torres (Aforca) y las administraciones local y regional de no ejecutar la sentencia que obligaba a Fomento a eliminar el pretil o remate de la Muralla del Mar y, en su lugar entregar a la citada asociación 435.000 euros en concepto de indemnización. Con este dinero Aforca ha encargado a la empresa HUMA Arquitectura de Cartagena la construcción de una réplica de la citada Puerta, una de las tres que servían de entrada a la ciudad en el siglo XVIII durante el reinado de Carlos III, y que fueron reconstruidas junto con las murallas con Felipe II. Finalmente las puertas se demolieron el 17 de mayo de 1902, ya en el siglo XX, coincidiendo con la proclamación de Alfonso XIII como rey de España y el comienzo del Modernismo.

El fallecido alcaide de Aforca, Aureliano Gómez Vizcaíno, quiso destinar este dinero a un proyecto cuantificado que pudiera terminarse y, por ese motivo se decantó por la citada puerta.

Los comercios del centro están conformes con que la ciudad gane un nuevo monumento, siempre y cuando no suponga limitaciones en el tráfico, advirtió Antonio Sánchez Arenas.

La ubicación del nuevo monumento aún no está definida, ya que no puede instalarse en su emplazamiento original, ya que que Cultura no lo permite al tratarse de una réplica y, por ese mismo motivo, tampoco puede incluir el escudo de armas de Carlos III, que es la única pieza original que se conserva de la antigua Puerta de Madrid y que se encuentra en las instalaciones del Museo Arqueológico Municipal Enrique Escudero de Castro.

El ayuntamiento de Cartagena tiene un mes para decidir cuál será su ubicación exacta. Una vez que conceda la licencia a HUMA Arquitectura y se tramiten todos los permisos necesarios, las obras tendrán un plazo de ejecución de siete meses. Sin embargo, el Consistorio aún no se ha pronunciado sobre este tema que se encuentra actualmente en estudio, informaron ayer a esta Redacción fuentes municipales.

La réplica será un monumento de más de once metros de altura, otros once metros más de longitud, y una anchura de más de tres metros. El ciudadano podrá verla igual por las dos caras, ya que el tramo abovedado que tenía por detrás para salvar los paños de las Murallas encarecería el proyecto. Se construirá usando sistemas actuales con hormigón y ladrillo, pero se revestirá con piedra 'baiteg' de color gris claro con lo que se pretende proporcionarle una estética lo más similar a la construcción original.