El adolescente de 16 años que murió electrocutado el lunes en la diputación de Pozo Estrecho, estaba presuntamente robando cableado y falleció al pisar un charco de agua mientras lo cogía. El fallecido era de etnia gitana, informaron fuentes policiales.

El suceso ocurrió el lunes sobre las ocho de la tarde. El cadáver fue trasladado al depósito mortuorio del hospital Santa Lucía de Cartagena y, desde allí se derivó a las instalaciones del Instituto de Medicina Legal ubicado en Santa Lucía. A lo largo del día estaba previsto que los forenses le practicasen la autopsia para esclarecer las causas exactas de su defunción, informaron las mismas fuentes. La noche del lunes un centenar de personas, entre amigos y familiares del joven fallecido, se acercaron a las inmediaciones del Instituto de Medicina Legal, algunos incluso con carricoches.

Según pudo saber esta Redacción en el Centro Regional de Coordinación de Emergencias del 112, no se recibió ninguna llamada alertando de esa situación.