Vecinos y residentes de Cabo de Palos denunciaron ayer la permisividad de la Policía Local al dejar estacionar en zonas prohibidas y condicionar así la seguridad vial en las calles de la localidad costera. Y es que, según indicaron fuentes vecinales, existen varias calles de doble dirección en las que los residentes de las urbanizaciones cercanas aparcan sin poder hacerlo, tal y como marcan las líneas viarias.

Es el caso, según denunciaron a esta Redacción, de la calle que discurre junto a la urbanización La Zeneta. «A diario hay entre diez y doce vehículos aparcados sobre línea amarilla, pese a que existen discos que lo prohíben», dijeron, añadiendo que pese a las denuncias vecinales las multas o las retiradas de coches no llegan.

Además, sostienen, supone un riesgo para la circulación, ya que restan visibilidad para salir de los cruces y ocupan parte del carril de circulación.