Recibir un diploma del coronel del Regimiento por la «constancia, ilusión y espíritu de sacrificio» en los años en que desfiló en un piquete de Artillería no es suficiente ni basta para conseguir la permanencia en el Ejército, según se recoge en una sentencia dictada por el Tribunal Superior de Justicia de la Región de Murcia (TSJ).

El dictamen desestima así el recurso presentado por un soldado contra la resolución del jefe de Estado Mayor del Ejército que le denegó la concesión del compromiso de larga duración. Dice la Sala de lo Contencioso del TSJ que el soldado expuso en su demanda que la administración militar, al adoptar esa decisión, no tuvo en cuenta los diplomas obtenidos a lo largo de seis años de servicio en un acuartelamiento de Cartagena (Murcia) y otros extremos que apoyaban su solicitud.

En relación con el absentismo laboral que jugó en su contra, alegó que se trataba de bajas médicas acreditadas. La Abogacía del Estado, al oponerse a la estimación de la demanda, expuso que existían razones para no acceder a lo solicitado, entre ellas, que todas sus calificaciones eran negativas, salvo en cooperación e iniciativa. Además, señaló que contabilizaba un alto absentismo -408 días de bajas médicas-, además de cuatro días de arresto por faltas leves. La Sala, al desestimar el recurso, señala que la resolución apelada se ajustó a derecho, por lo que procede su mantenimiento.