Mamma Mía debió pensar más de uno cuando vio ayer el sarao que se montó en el centro de Cartagena mientras la conocida canción del icónico grupo Abba daba el pistoletazo de salida a la séptima marcha del Orgullo LGTB.

Más de 300 personas inundaron el centro de la ciudad, de la mano de Galactyco, por la igualdad del colectivo de gays, lesbianas y transexuales. Todo estuvo aderezado por un sinfín de coreografías e ingeniosos lemas. No faltaron diversas formaciones políticas y colectivos. El alcalde, José López, y la vicealcaldesa, Ana Belén Castejón, eran dos de los rostros protagonistas que sujetaban la pancarta que abría el recorrido por la calle del Carmen. En ella se podía leer «Leyes por la igualdad real ¡ya!´».

La fiesta seguía con el ruido de una batucada y el ritmo de decenas de jóvenes bailarinas. Entre tanto, un armario abría literalmente sus puertas de par en par junto al Icue para todo aquél que se animara a salir de él. Aunque el Orgullo cartagenero da la impresión de que ha llegado para quedarse de la mano de las coloridas carrozas que ayer desfilaron.

La bandera de la diversidad ondeaba en el palacio Consistorial y la fiesta se alargó hasta la explanada del puerto.