Alrededor de medio millar de personas protagonizaron ayer una sonora cacerolada con pitos incluidos en contra del cierre del hospital del Rosell. Los manifestantes convocados por el colectivo 15M y la plataforma Stop Desahucios de Cartagena, junto con los sindicatos CC OO, UGT y FSP-RM, cortaron el tráfico en el paseo Alfonso XIII, desde la plaza de Alicante hasta la entrada del centro sanitario.

Gritando mensajes del tipo ´Menos mentiras y más soluciones´ y ´Este hospital no se va a cerrar´, los manifestantes, que llevaban una pancarta en la que se podía leer ´No al cierre del Rosell´ mostraron su rechazo al desmantelamiento del centro. «El gerente del Servicio Murciano de Salud dice que sólo le falta ir casa por casa diciendo que el Rosell no cierra, pero que yo sepa un hospital es un sitio donde hay enfermos y aquí no hay ninguno. Podrá ser un centro de consultas externas, pero desde luego no una instalación hospitalaria», señaló José Mulas, delegado de CC OO en el Área II.

Durante el corte de tráfico que se prolongó unos veinte minutos el conductor de un vehículo quiso subirse a la acera con su coche y fue increpado por uno de los manifestantes. La Policía Nacional tuvo que intervenir para apaciguar los ánimos, pero afortunadamente no se produjo ningún incidente.

Posteriormente, los manifestantes se dirigieron al recinto sanitario donde encendieron varias velas en señal de duelo por el hospital. Sobre las siete de la tarde una docena de trabajadores del centro, todos delegado sindicales, se encerraron en el vestíbulo del hospital dispuestos a pasar la noche en sacos de dormir y colchonetas. «Vamos a encerrarnos hasta el domingo por la tarde o el lunes por la mañana. No podemosquedarnos de brazos cruzados mientras vemos como desmantelan el hospital», señalaron.