La falta de recursos económicos retrasará el inicio de la segunda fase de las obras de restauración de la Catedral de Santa María la Vieja de Cartagena. El director de Bienes Culturales de la Comunidad Autónoma, Francisco Giménez, aseguró a esta redacción que desde el Gobierno regional se está velando porque se hagan «las cosas bien». Giménez pidió a la Dirección General de Patrimonio Cultural, en una entrevista celebrada la pasada semana, que no abandone el proyecto de la Catedral por su importancia patrimonial e histórica. «El proyecto para iniciar la segunda fase saldrá adelante. No este año, pero sí el que viene», declaró Giménez.

La primera fase de las obras se inició a finales del año pasado y concluyó en junio. A cargo del ministerio de Cultura y con una financiación de 252.199 euros, esta etapa de restauración se centró en reparar los daños causados por la humedad, así como pilastras, coronaciones de los muros y contrafuertes del edificio. También se adecuaron las capillas del Socorro, de San Ildefonso y del Rosell o del Concejo. En concreto se llevaron a cabo trabajos de carpintería en puertas y ventanas. También se adecuaron las pinturas y los elementos decorativos de estos espacios religiosos.

Este monumento histórico, patrimonio de la ciudad de Cartagena que data del siglo XIII, ha sido rehabilitado en anteriores ocasiones, la última vez en el siglo XIX. Sin embargo, con los bombardeos que sufrió durante la Guerra Civil, quedó bastante dañada, lo que imposibilitó su uso como lugar de culto. Algo que hoy se está intentando recuperar con su restauración.

La rehabilitación de la Catedral de Santa María ha sido reclamada por los cartageneros durante muchas décadas. De hecho, incluso hay una asociación cuyo único fin es conseguir que este inmueble recupere su esplendor original y su importancia eclesiástica dentro de la diócesis de Cartagena.

Tras la última rehabilitación ya es posible que se recupere para el culto alguna de las capillas del templo. La decisión última corresponde al Obispado, que de momento no se ha pronunciado al respecto.

La cofradía del Socorro es una de las más interesadas en que se recupere para el culto la Catedral ya que el Vía Crucis que protagonizan en Semana Santa, y que es el primer desfile pasional que se celebra en el país, sale de las inmediaciones del templo.

Hace doce años, el Cristo del Socorro salía del interior de la Catedral, pero el mal estado del inmueble impidió que continuara esta tradición.

Sin embargo, la cofradía se resistió a trasladar el inicio de su vía crucis a la iglesia de Santa María de Gracia, de donde parten la mayoría de los desfiles pasionales, y construyó una carpa que cada año se instala en las inmediaciones de Santa María la Vieja, de donde parte el Cristo Moreno. El objetivo de esta cofradía es volver a salir de la Catedral.

Este inmueble también podría incluirse dentro del recorrido turístico del Teatro Romano, junto al que se encuentra. De hecho, alguno de los sillares de esta joya arqueológica se utilizaron para la construcción del templo, que está directamente conectado con el yacimiento.

En la primera fase de las obras de rehabilitación se ha llevado a cabo una exhaustiva investigación histórica así como una importante actuación arqueológica. De hecho, dentro de el recorrido cultural e histórico del yacimiento hay numerosas referencias a la Catedral de Santa María la Vieja, ya que ambos espacios están estrechamente vinculados arquitectónicamente.