Harta de parcheos y soluciones temporales, la concejalía de Infraestructuras ha decidido atacar de raíz el problema de los adoquines de la Serreta eliminando estas piezas para echar asfalto en su lugar. El concejal de Infraestructuras, Francisco Espejo, explicó ayer a esta redacción que otra opción hubiera sido cubrir los adoquines con una capa de microasfalto, «pero era una solución temporal que podía ser un desastre», dijo.

También se consideró la posibilidad de hormigonar los tramos más deteriorados o asfaltarlos, «pero finalmente hemos optado por retirar los adoquines centrales en la zona de la plaza del Sevillano para asfaltar ese tramo y todo parece indicar que queda bastante bien de cara a la Semana Santa y el paso de los penitentes y los tronos».

Espejo insistió en que «si esta prueba da buenos resultados, asfaltaremos toda la calle, excepto el tramo de basalto existente en la zona de la iglesia de la Caridad, que tiene un tratamiento especial y no está deteriorado».

El edil hizo hincapié en que la intención del Ayuntamiento es dar la mejor solución a esta calle para que las procesiones no tengan ningún problema al pasar por ella. «Somos un municipio eminentemente turístico y parchearla por tramos habría sido bastante cutre», dijo.

Asimismo, avanzó que de manera paralela se van a arreglar los adoquines de las calles Campos, Jara, Aire y Cañón, vías principales por las que discurren los desfiles procesionales.

«En la calle del Aire se pondrán dos paños de hormigón impreso de unos 15 metros de longitud. Este material simula los adoquines, con lo que se mantendrá la estética de la calle», precisó. Los arreglos en estas vías se iniciarán en breve, con el fin de que todas estén en perfecto estado de cara a la próxima Semana Santa.

El edil no supo precisar cuánto dinero han supuesto para las arcas municipales los constantes arreglos de la Serreta desde que se remodeló esta vía hace siete años. Sin embargo, sí aclaró que el asfaltado de esta calle cuesta alrededor de 30.000 euros.

El citado asfalto servirá para igualar los desniveles existentes en la actual zona adoquinada, de manera que quedará a la misma altura que las aceras.

«Es una prueba para la reforma que pondremos en marcha en verano en esta calle y en Arco de la Caridad, donde también se asfaltará el tramo destinado a los coches», precisó.

La citada reforma incluirá además las plazas del Risueño y del Sevillano y la calle San Vicente. Esta última vía no se arregla desde hace décadas, por lo que incluirá la renovación de las redes de agua y saneamiento, destacó Espejo.