La renovación california prevista por la puesta en marcha de los nuevos estatutos no ha sido tanta. De las 16 agrupaciones encarnadas, sólo seis estrenan presidente. El resto mantienen a sus dirigentes por decisión mayoritaria de los hermanos. Ahora, queda el último paso, elegir nuevo hermano mayor, algo que ocurrirá tras la Semana Santa.

Los nuevos presidentes de la cofradía del Prendimiento son: Francisco López Fidel, de la Oración en el Huerto; Mari Ángeles Abellán, de la Sentencia; Caridad Cañavate, de la Junta de Damas; Francisco Javier Saura, de la Santa Cena; y Pedro Ayala, del Cristo de la Flagelación. A ellos se une el vicepresidente ejecutivo de San Pedro, Fulgencio Cervantes, que ganó las elecciones en el año 2010. También ese año Francisco Egio ganó la presidencia del San Juan.

El resto de presidentes han sido reelegidos durante las votaciones que se celebraron el pasado año.

Ahora queda la fase final del proceso de renovación que se puso en marcha con la destitución del hermano mayor, en junio de 2010. Juan Manuel Moreno Escosa fue relegado de su cargo por el obispo José Manuel Lorca Planes, que nombró en su lugar a Juan Carlos de la Cerra. El obispo alegó que este paso era necesario por la puesta de los nuevos estatutos, aunque Moreno Escosa y muchos presidentes californios consideraron que esta interpretación no era adecuada ni legal.

Esto provocó una división interna en el seno de la cofradía, lo que ha complicado la gestión del hermano mayor en funciones durante los dos últimos años.

Transcurrido este tiempo, parece que las aguas no han vuelto a su cauce y que muchos presidentes siguen pensando que lo que ocurrió con Moreno Escosa fue una injusticia.

De la Cerra ya ha anunciado en múltiples ocasiones que no tiene intención de presentarse a las elecciones para continuar como hermano mayor. Asegura que fue designado para un fin concreto, que era la puesta en marcha de los nuevos estatutos y la regularización de todas las agrupaciones con la celebración de elecciones conforme a la nueva normativa, y que culminado este trámite, abandonará la dirección de la cofradía.

Ahora, falta ver quién está dispuesto a coger el relevo. Son muchas las incógnitas que se plantean y que pocos se atreven a valorar hasta después de Semana Santa, alegando que lo importante ahora es sacar las procesiones a la calle con todo su esplendor.