Más de 5.000 ciclistas, el doble que el pasado año, convirtieron ayer las calles de la ciudad en una marea de peales, con motivo de la celebración del la X Fiesta de la Bicicleta. Entre los participantes había centenares de vecinos de Canteras, El Bohío-Los Dolores, Los Barreros, y San Félix-Barrio Peral. Estos últimos pedalearon unos 20 kilómetros.
Aitana Díaz Ros, de tres años de edad, paseó en bici por la ciudad junto a Javier, su padre. «Hemos venido desde La Vaguada. La niña se ha comido un paquete de chicles durante la ruta para reponer fuerzas», destacó Silvia, su madre.
Pedro Laguna, de diez años, confesó: «Lo que más me gusta es que pasamos junto al ascensor de la calle Gisbert». A su llegada a la plaza del Ayuntamiento, los ciclistas asistieron al sorteo de nueve bicicletas y a la entrega de premios. Antonio Bernal de Canteras se llevó el premio a la bicicleta más original. «Es reclinable», explicó. El IES El Bohío y el colegio Fernando Garrido se hicieron con el premio a la participación.
El premio a los participantes de más edad fueron para Lorenzo Cazorla, de 83 años y para Antonia Pérez, de 66 años. Entre los asistentes había perros, patinadores y gente con la camiseta del Cartagena. «Los polílticos deben dar los pasos para que los ciudadanos puedan usarlas como medio de transporte. El año que viene deberían de cortar el tráfico este día, ya que no celebramos el Día Europeo sin Coches», señaló José Ángel Vivancos, presidente del colectivo Vía Libre, organizador del evento, junto con el Patronato de Deportes y Decathlon.
