El Ayuntamiento pondrá en marcha el próximo año un nuevo sistema que permitirá controlar el tráfico en las principales calles de la ciudad en tiempo real. Se trata de cámaras de vigilancia que permitirán conocer a los responsables de Tráfico cuál es la situación de las carreteras y en función de la misma regular los semáforos para reducir los atascos o retenciones.
La instalación de las cámaras y de toda la infraestructura que requieren ha costado cerca de un millón de euros y estará terminada a finales de este año. "En función de lo que los técnicos vean a través de estas cámaras se irán regulando los semáforos", aclaró el director general de Seguridad.
El centro de control de estas cámaras se instalará en el Parque de Seguridad y en él trabajarán un ingeniero de Caminos y un agente de la Policía Local.
"Poco a poco estamos mejorando la situación del tráfico en la ciudad. Los técnicos retocan a diario el plan de tráfico para ir adaptándolo a la realidad", explicó Carlos Nieto.
A pesar de estos controles hay zonas en las que los atascos y las dificultades son cada vez mayores como la calle Real, el Paseo Alfonso XIII, la plaza de España o la Alameda de San Antón, entre otras. Las obras que se llevan a cabo, como la remodelación de la calle Real o la ampliación del aparcamiento subterráneo de la Plaza de España, contribuyen a agravar esta situación.
Muchos colectivos sociales e incluso el propio Ayuntamiento abogan por la utilización de medios de transporte alternativos como las bicicletas o los autobuses urbanos para paliar los problemas del tráfico. El Consistorio puso en marcha el programa Bicity, de alquiler de bicicletas, con este fin, aunque ahora está parado porque se va a remodelar.
