Decenas de inmigrantes invaden de forma habitual el abandonado cine Central, ubicado en la plaza de la Merced, más conocida como el Lago, denuncian los vecinos y comerciantes de la zona.

Los residentes de la zona explican que los 'okupas' acceden a las instalaciones del viejo cine rompiendo la cadena de una de las puertas laterales de la calle don Roque, que pertenece a un edificio de viviendas anexo a la sala y desde el que pueden pasar a la misma.

"Entran familias enteras, que se meten con sus propios muebles para dormir y para hacer vida allí. Lo han convertido en su hogar", comenta un vecino.

Aseguran que la policía ya ha ido a desalojarlos varias veces, pero en cuanto los agentes se marchan, al poco tiempo éstos vuelven a colarse en el antiguo cine, por lo que piden que se tapien las puertas.

Esta situación, unida a la proliferación de pisos donde se ejerce la prostitución en las calles del entorno, tiene encrespados a los vecinos y comerciantes, quienes han solicitado una reunión con el delegado del Gobierno para tratar de que la zona no se degrade más de lo que está.

De hecho, el mal estado en el que se encuentra la plaza de la Merced, hace peligrar la recuperación precisamente del viejo cine Central, que un grupo de inversores madrileños quiere rehabilitar para abrir en este inmueble un teatro que funcione como el Liceo de Barcelona, en el que los espectadores pueden alquilar las butacas.

El antiguo cine Central está protegido en el catálogo de Bienes e Inmuebles y actualmente se encuentra en manos de un grupo de empresarios valencianos.

Los vecinos, los comerciantes y estos empresarios piden una actuación conjunta de las Administraciones para erradicar la prostitución y el deterioro de esta emblemática plaza de la ciudad.