La sexta edición de los 10 Kilómetros Ciudad de Murcia-Gran Premio Hipercor más veloces de su corta pero su sólida historia, tuvieron ayer como protagonistas al murciano José Antonio Alcaraz y a la marroquí afincada en Cartagena Wafiya Benali, quienes volvieron a subir por segundo año consecutivo a lo más alto del podio, aunque para la corredora del Nogalte ya son tres los éxitos en las calles de la capital. Alcaraz, murciano, preparador de un buen número de atletas populares y de opositores, de larga zancada, batió el récord de la prueba con un tiempo de 30 minutos y 36 segundos, más de un minuto más rápido que en 2015. Por su parte, Benali acabó en 36:36, idéntico registro al que firmó hace justo un año sobre el mismo recorrido.

La prueba que abrió el Circuito 3x2, que reparte 2.000 euros en premios y para el que también puntúan la Carrera Navideña del 13 de diciembre y la Media Maratón del domingo 13 de marzo, contó con una sobresaliente organización del Club Atletismo Murcia. El podio masculino lo completaron Javier Villegas, que otro año más se vio superado por Alcaraz, y el lorquino Luis Miguel Torroglosa, presidente del club Daen Lorca, quien se probó de cara a la media maratón de la Ciudad del Sol que se celebra el 29 de noviembre. En féminas, Benali cruzó la línea de meta en solitario con la incombustible Mercedes Merino, que ahora pertenece al Fondistas Alcantarilla, en la segunda plaza, y la almeriense Esther Gálvez en la tercera.

La lucha fue más reñida en los 5 kilómetros -una sola vuelta al circuito-, donde el murciano Antonio Iniesta demostró encontrarse en un excelente momento de forma al ganar con 16:19. El segundo puesto fue para el lorquino Mario Molina, con 16:25, mientras que Bruno Alfonso Colomer, de la pedanía murciana de Churra, fue tercero. En féminas, la corredora residente en Cabo de Palos Raquel María Martínez Lasheras se alzó con el primer puesto con 21:33, siendo segunda Mar Gómez y tercera, Paqui Rubio.

La carrera estuvo marcada por el recuerdo a las víctimas del atentado terrorista de París. Si hace un año se celebraba un minuto de silencio por los fallecidos en el accidente de tráfico de Bullas, ayer todos los atletas mostraban su repulsa al terrorismo. En la línea de salida se desplegó una bandera francesa con un crespón negro y varios corredores no dudaron en pintarse la cara con los colores de Francia.