El gesto de Jordan Bohannon está dando la vuelta al mundo. El jugador universitario de los Iowa Hawkeyes falló a propósito un tiro libre (que hubiera sido su 35º acierto de forma consecutiva) para no quitarle el récord a Chris Street, un joven fallecido hace 25 años de un accidente de coche. Los padres de Street, que se encontraban en la grada, se emocionaron con la actitud de Bohannon.

La jugada se produjo a los 2:15 minutos del segundo cuarto. El jugador podría haber conseguido su 35° tiro libre consecutivo pero, en vez de ir a por el récord, disparó flojo y la pelota rebotó en el aro. Tras el fallo, se golpeó el pecho y apuntó al cielo.

A pesar de errar el tiro libre, el partido terminó en victoria para los de Iowa, quienes rompieron una racha negativa de seis partidos perdidos.

Tras terminar el partido, Bohannon se fundió en un abrazo con la familia de Street y aseguró que "la vida es mucho más grande que el baloncesto".