Una vez más, un gesto sencillo y de mucha sensibilidad, muy pequeño pero a la vez enorme, ha hecho feliz a un niño. Emma Louise Passmore es una mujer británica que tiene un niño con autismo. Madre e hijo fueron a Tesco, una cadena de supermercados a última hora de la tarde a hacer una pequeña compra para hacer la cena. Cuando llegaron a la caja de cobro, el chico comenzó a hacer de las suyas y lloriquear. Pero Carol, la cajera, vio la situación y le propuso al pequeño que le ayudara a escanear los productos.

Este sencillo gesto hizo que el chaval cambiara por completo de actitud. Su madre asegura que es un chico que tiene enormes problemas para relacionarse con desconocidos, pero que el cariño que mostró Carol hizo que el chico interactuara con ella de manera natural, sacándole una sonrisa y haciéndole feliz por unos momentos.

Emma Louisse quedó tan agradecida que publicó en su Facebook lo que le había pasado, y se ha convertido en un fenómeno viral en esta red social. Así reza el post que escribió el pasado miércoles:

''Solo quiero contar el fantástico servicio que recibimos de una señora llamada Carol en la caja de cobro sobre las 08:30 de la noche pasada. Nuestro hijo es autista y sufre de un desorden del proceso sensorial por lo que hacer la compra es algo casi imposible. Así que decidimos ir más tarde pensando que así podría lidiarlo mejor. De ahí que esté en pijama. Cuando fuimos a la caja de cobro empezó a hacer de las suyas y Carol le ofreció estar con ella y que le ayudara. Normalmente odia a los extraños pero ella le gustó mucho, se fue con ella y le ayudó a escanear la compra de 270 libras. Le gustó tanto que no quería irse. Así que gracias a Tesco y a Carol por darnos nuestra mejor y memorable experiencia de compra''.

En ocasiones, hacer algo bueno por la gente y darles un momento de felicidad no cuesta nada. Y para los demás, ese momento significa mucho. Así, se puede seguir creyendo en la humanidad, con cosas como esta.